A pesar de que 2 de cada 3 consumidores dispone de un Smartphone conectado a Internet, el pago móvil está todavía muy poco extendido, porque su uso plantea muchas inquietudes y dudas para los consumidores.
Entre estas preocupaciones se encuentran la seguridad de los pagos móviles y la incertidumbre sobre la atención al cliente de dichos pagos en caso de que surja algún problema.
Según una investigación de Oxygen8, para solventar estas incertidumbres, sería necesario facilitar el proceso de pago en móviles; el 55% de los consumidores estaría dispuesto a utilizarlo, si se redujera el procedimiento a un solo clic, y el 56% afirma que la forma habitual de pago móvil es demasiado compleja, ya que requiere una multitud de pasos.
De acuerdo con los datos del estudio, en Estados Unidos tan sólo el 33% de los consumidores de entre 18 y 44 años ha utilizado alguna vez el móvil para pagar; los pagos móviles todavía no han alcanzado un nivel de uso generalizado.
A nivel global, un estudio de MasterCard revela que menos del 20% de los consumidores se atreve con los pagos móviles. Se reconoce que es un sistema de mucha utilidad, y por eso es imprescindible invertir en seguridad y en funcionalidad del método, para transmitir confianza a los usuarios; así podrán derribar esta barrera de entrada y los pagos móviles empezarán a generalizarse.
Otros datos
Un estudio realizado por Jumio, apunta a los usuarios perciben sus dispositivos móviles como terminales mucho menos seguros que los ordenadores de mesa o portátiles, algo que produce que las transacciones a través de smartphones y de tabletas puedan crecer menos de lo que se espera.
La investigación señala que el 65% de los usuarios de m-commerce o comercio móvil, es decir, ventas a través de dispositivos móviles, abandonan su compra antes de efectuarla. De estos, más de la mitad lo hacen porque sienten que la transacción no es del todo segura como para ofrecer sus datos personales y bancarios.
El mismo informe que estudia es desarrollo del comercio móvil también señaló que el 47% de los encuestados que habría estado dispuesto a pasar por alto ciertas preocupaciones de seguridad móvil, pero que abandonó la compra por la cantidad de tiempo que tardaba en cargar la página y en completarse el pago que a través de su smartphone o tableta.
Concretamente, más de un cuarto de los participantes dijo que habían tratado de hacer una compra, pero que por alguna razón técnica, descubrieron que su orden no podía llevarse a cabo.
Por Periodista Digital, Ricardo Rodríguez
Equipo Mipagina.net