De acuerdo con el Centro Philips para la Salud y el Bienestar, la mayoría de los consumidores piensan que las nuevas herramientas tecnológicas, específicamente el Internet, han mejorado sus vidas en muchas áreas, excepto en las relaciones personales.
La comunicación, el acceso a la información y los tratamientos médicos, son algunos de los aspectos a destacar, y son los que los navegantes sienten que influyeron positivamente en situaciones de su diario vivir.
Además, el 64% de los encuestados dijo que Internet les había hecho la vida mejor, pero sólo el 26% dijo lo mismo de los servicios de redes sociales como Facebook, MySpace y Twitter.
De acuerdo con este estudio, se pudo determinar que el nivel de acceso a los sitios de Internet esta determinado por tres variables: la tecnología, la buena calidad y el mejor precio. Las mujeres parecen estar más interesadas en que la tecnología les sirva para su bienestar, así como que les ayude a ahorrar tiempo. Mientras que los hombres están más interesados en funciones personalizadas de los sitios.
Poco menos de la mitad de los consumidores informó que la tecnología es fácil de usar, y un 32% consideraba que había una buena mezcla de características avanzadas y funciones básicas. En el 2004, sólo el 13% de los encuestados pensaba que la tecnología era fácil de usar, lo que indica un aumento dramático en el nivel de los usuarios que observan una mayor comodidad en su utilización.
Los encuestados de 18 a 24 años, manifestaron que la tecnología es más fácil de manejar, mientras que en las edades comprendidas entre los 55 y los 100 años, fueron más propensos a decir que era demasiada compleja para operar. Los hombres, al parecer, informaron tener más facilidad de uso que las mujeres.
La buena alianza de la comodidad con la tecnología, también va de la mano del aumento de los encuestados que piensan que las empresas entienden ahora más sus necesidades con un 37%. Sin embargo, la mayoría de los consumidores dice que las empresas solo piensan en vender y el 39% aduce que los fabricantes sólo creen en sus propias ideas, sin tener en cuenta las del usuario.
Un tercio de los encuestados reportó una considerable desconexión con los vendedores de alta tecnología, diciendo que las compañías no tenían ni idea de lo realmente necesitaban y que por el contrario hacían parecer a todos los usuarios como clones,
con vidas exactamente similares y con deseos de utilizar los mismos productos y servicios. En este aspecto las mujeres se situaron más de 7 puntos porcentuales por encima de los hombres, frente a esta percepción.
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