Para la mayoría de personas que han tenido algún tipo de acercamiento a las redes sociales, e incluso para muchas de las que hoy en día las utilizan, existe la impresión de que, en términos generales, son muy banales y prácticamente inútiles. Simplemente son vistas como herramientas de entretenimiento y diversión.
Sin embargo su objetivo inicial, con el que fueron concebidas, podría ser la clave para que se les saque un mejor provecho, incluso en la parte educativa. La forma en que nos conectamos y contactamos con los demás, así como la visión que tenemos de otros y la que ellos tienen de nosotros, podrían ser un elemento de ayuda en la formación de los niños y jóvenes de hoy.
Es por eso que en muchos modelos educativos, se les está abriendo el espacio al uso de estas nuevas tecnologías de la comunicación, que podrán permitir una mejor interacción entre maestros, alumnos e incluso padres de familia.
Bien empleadas estas redes, serán un recurso de ayuda y entre más personas de la escuela o el colegio participen en ellas, mejor será su desempeño.
Comunicación efectiva
Resulta bastante atractivo para los estudiantes relacionarse a través de este medio con sus profesores y compañeros, con los que quizás en persona nunca han mantenido una charla. Esto facilita un ambiente de camaradería virtual, muy favorable para una futura socialización cara a cara, que crea espacios educativos más saludables.
La mejora en los procesos de comunicación, será entonces uno de los resultados de la interacción del grupo, no importa si este es muy es grande (incluso mejor si es así), ya que habrá más posibilidades de relacionarse y una retroalimentación más diversa.
Las mismas herramientas que ofrecen estas redes sociales, como los mensajes públicos, los mensajes en muro, los foros, los comentarios, los blogs o los correos electrónicos, servirán para agilizar esa situación y hacer más efectiva la comunicación.
Otra razón que se debe mencionar, es que los métodos de aprendizaje se pueden complementar muy bien con el uso de las redes. En el proceso de formación muchas veces no se tiene en cuenta la opinión del alumno, por distintos factores, la red permite que el joven se exprese, conozca otras opiniones y entonces entienda la verdadera dinámica que debe tener la educación.
Cuando se ingresa a una red social, lo que más llama la atención es la posibilidad de configurar la propia página, el perfil, las fotos, etc. Esta característica se debe mantener para este caso, ya que permite conocer más al alumno en sus gustos, su creatividad, sus inquietudes, lo que él mismo es. Esta libertad, claro está, deberá estar limitada por el respeto a los demás, situación que debe ser enseñada por los mismos profesores.
Otra posibilidad que brindan las redes es la creación de grupos. En el caso que se analiza, es muy interesante crear grupos de interés en diversos temas, gustos o afinidades, que permitan relacionarse con otros miembros y que den la capacidad de compartir a través de la misma red o de manera personal.
Pero las ventajas también se dan en la relación entre profesores, pues el trabajo se puede coordinar mucho mejor entre aquellos que manejan las mismas asignaturas, habrá un manejo de comunicación más efectivo y el trabajo, la cooperación y los lazos de unión se verán reforzados.
Los padres de familia también pueden estar integrados a esa red. Lo que facilita su inclusión en la educación de sus hijos.
Como bien se puede observar una red permite focalizar en un solo sitio toda la comunidad educativa. Esto último traerá como consecuencia un sentido de pertenencia y cercanía entre todos los actores.
Complementario
Es bueno que en estas redes se sigan los parámetros establecidos en materia de privacidad y seguridad, e informar a los alumnos de la importancia de mantenerlos y respetarlos. Esto será también un ejemplo para la vida cotidiana. El administrador debe estar al tanto de eliminar el contenido inapropiado y de bloquear aquellos usuarios que estén mal empleando la red.
Al tratarse de un trabajo, cuyos miembros en su gran mayoría son menores de edad, es mejor utilizar redes cerradas, que eviten la difusión de información personal de los alumnos, que pueda ser utilizada de manera incorrecta por otros.
En fin, son muchas las ventajas que se le puede sacar a un red social en un ambiente educativo. Lo interesante del asunto está en implementar un buen modelo dentro de la escuela o colegio.
El auge de este tipo de escenarios virtuales, no puede ser ignorado en las aulas y sí por el contrario se le debe ver el lado útil. Si se emplea de la manera correcta, en el futuro la comunicación podría ser más acertiva.
Este mecanismo, es solo un elemento más, que servirá para reforzar el papel de las relaciones humanas. No entrá a reemplazar, ni a competir con ningún otro. El ideal de la educación siempre ha sido la interacción entre maestro y estudiante, de manera directa y personalizada y eso en lo posible se debe mantener.
Por Periodista Digital, Ricardo Rodríguez
Equipo Mipagina.net