“Hola, soy Irene@. Yo he sido el orgulloso propietario de este Twitter desde el año 2006” Ese fue uno de los mensajes enviados por Irene Tien, no el huracán sino la persona detrás de la cuenta de Twitter, que como consecuencia del fenómeno natural, vió como le comenzaron a llover, paradojicamente, centenares de mensajes.
Esa es la clara demostración de que en el mundo de las Redes Sociales, hasta la forma en que se denomina una cuenta en Twitter, Facebook,etc, puede prestarse para confusiones y situaciones curiosas.
En el caso particular de esta usuaria, el tener ese nombre de pila, hizo que la tormenta le adicionara 11 mil nuevos seguidores a su perfil.
“A principios de la semana pasada, la gente comenzó a twittear mensajes a mí cuenta, para, de alguna manera, comunicarse con el huracán Irene. En respuesta, el jueves coloque un mensaje en el que les respondía que: @irene no podía entregar mensajes a los huracanes, lo siento». señala Ire Tien.
Lo curioso es que los retweeting de los conocidos no se hicieron esperar, lo que produjo que más y más gente comenzara a ver la cuenta de Irene, ya para el viernes se volvieron a compartir más de 100 veces. Irene trató de no prestar más atención al hecho.
Pero la situación fue mucho más allá. En la tarde muchas personas de la prensa y de la propia compañía Twitter, se comunicaron con Irene para pedirle prestada la cuenta, por lo menos por el fin de semana, pues se estaba convirtiendo en el canal más empleado por los norteamericanos para hablar del evento meteorológico.
“Ross Morrison, director creativo asociado de Twitter, y Bjorn Larsen, un redactor, querían pedir prestada mi identidad sólo para el fin de semana. Ross había encontrado una foto mía en Buzzfeed con la leyenda: @Irene es una persona real, no el huracán».
Después de mucho pensarlo
Luego de pensarlo bien, Irene no podía entender por qué no quería sacarle el máximo provecho a esta casualidad. Sin embargo su grupo de amigos y un pequeño empujón del Director creativo Joe Stewart, le seguían dando vueltas en su cabeza, a la velocidad de un huracán.
Lo que no pretendía Irene era hacerse pasar por un huracán y prestar su cuenta personal, a personas que quizás se mostraran insensibles, ante aquellos quienes podían estar sufriendo los estragos de la tormenta.
Finalmente Irene permitió la utilización de su perfil a Ross Morrison y a Bjorn Larsen durante el huracán. Así que la cuenta se convirtió en un lugar para algo más que hacer bromas. Gracias a @irene se pudo utilizar la Red Social como recurso central para las actualizaciones y las advertencias sobre el huracán.
Incluso el equipo se puso en contacto con FEMA y se ofreció a darles acceso a la cuenta si hiciera falta, mientras la tormenta se desarrollaba.
El primer obstáculo, sin embargo, era darle una voz humana a la que los usuarios pensaban era una cuenta eventual, además porque de cierta manera se le iba a dar personalidad a un fenómeno que representaba una amenaza real para las personas y sus propiedades. @irene, además, tenía que tener un punto de vista femenino.
Lo primero fue darle el carácter de un desastre consciente de sí mismo, que comprendía su potencial para causar la devastación y que no tenía control sobre sus acciones. A veces las cosas malas o feas, cuando se dicen en un buen tono pueden ser menos dañinas.
Twitter comenzó entonces a proporcionar toda la información en tiempo real de fuentes oficiales, Ross y Bjorn hicieron algunas bromas y chistes acerca de la cobertura de la tormenta, para calmar los ánimos, pero también publicaron información relevante de los expertos de la FEMA y la oficina del alcalde.
Escondidos en el apartamento de Ross en Brooklyn, durante dos días, observaron la marcha de la tormenta hasta la costa, hasta que esta finalizó y abandonó los EE.UU. Durante ese tiempo, el número de personas siguiendo a @ irene se disparó a casi 11.500, cuando antes del huracán Irene Tien solo tenían 630 personas en su comunidad virtual.
Durante unos días el perfil de Irene, una mujer de carne y hueso, se convirtió en el de un personaje antropomorfo, un hecho bastante trascendental en el mundo de los medios sociales. Como uno de los fans de la cuenta lo dijo @vosdscott en un tweet este fin de semana: «Nombrar a los huracanes por nombres propios es algo que a veces no se entiende, pero con el caso de Irene realmente que se pudo hacer mucho a través de Twitter”.
Sin lugar a dudas que este hecho curioso, ha disparado la atención de todos quienes trabajan con los medios sociales en labores de marketing, publicidad y promoción. Lo primero es que las Redes deben ser aprovechadas por las empresas, que tienen que establecer una ventaja de estas oportunidades, para así tener éxito en la vida social virtual.
Lo segundo es que los medios sociales pueden ser utilizados para ayudar en casos humanitarios y promover medidas de solución o de prevención y no son simplemente herramientas para la superficialidad y la pérdida de tiempo.
Parece ser que de ahora en adelante, la importancia de los nombres de los huracanes no solo es porque tienen algún significado en particular, o recuerdan a algún personaje mítico, en la actualidad cobran otra dimensión con el uso de las Redes Sociales.
Por eso tenga en cuenta si su nombre es el mismo de una de estas amenazas naturales y posiblemente su perfil en Twitter o Facebook, sirva algún día para darle carácter humano y ayudar a pasar la tormenta.
Por Periodista Digital, Ricardo Rodríguez Guerrero
Equipo Mipagina.net