Existe una muy buena manera de emplear todos aquellos comentarios, opiniones y hasta críticas de las personas, en favor de una marca, producto o servicio. Es el llamado Crowdsourcing, que con el fenómeno de las nuevas tecnologías de la comunicación y la información, como las Redes Sociales, tiene un mayor significado hoy en día.
En un mundo cada vez más competitivo, las empresas se la juegan el todo por el todo en sus campañas de marketing on line y off line. Muchas son las técnicas o estrategias que pueden utilizar para sorprender a su competencia, pero una de ellas involucra netamente a los consumidores.
Se trata del Crowdsourcing. Según GestioPolis.com, el término fue creado por Jeff Howe, editor de la revista tecnológica Wired. Etimológicamente, esta palabra proviene de crowd (multitud) y sourcing (abastecimiento), por lo tanto, crowdsourcing no es otra cosa que utilizar la fuerza de las multitudes como proveedoras de trabajo, generalmente intelectual.
En este sentido, las agencias de publicidad utilizan el Crowdsourcing para pedirle a sus clientes o consumidores que entreguen lluvia de ideas acerca de una marca o producto, para mejorarlo o potenciarlo dentro del mercado.
Al respecto, el sitio Mashable Business señala que a menudo los consumidores son llamados a ser participantes activos en la comercialización de su marca favorita y entrega algunas reglas básicas de cómo se debe ejecutar el crowdsourcing en las campañas publicitarias:
1. Sea claro en lo que necesita. Si va a pedir ideas a los clientes debe ser sumamente específico para obtener las ideas que necesita.
2. Ofrezca buenos incentivo: Si le va a entregar dinero, ofertas, o regalos a los clientes o consumidores, por participar de este proceso, que por lo menos sea un monto que haga valer la pena el que ellos estén ahí ayudándole, si no, no tendrán la motivación suficiente para aportar con ideas.
3. No abrume a los consumidores. Ellos están dispuestos a ayudarle en su campaña publicitaria, pero si los fastidia más de la cuenta se aburrirán y lo único que querrán será irse lo antes posible de ahí.
4. Prepárese para una lluvia de ideas. Sin duda que los clientes y consumidores tendrán un montón de ideas que entregar y la labor más ardua será seleccionar cuál de todas es la más apropiada para su campaña.
5. Crowdsourcing no es igual a «no profesional». Los clientes y consumidores están aportando con ideas, porque de una u otra forma les está pagando por sus servicio.
Ejemplos de éxito
Algunos casos de campañas de marketing y publicidad que han sido exitosos gracias a la cooperación de sus clientes o consumidores son, según Marketing Directo.com, cuando Nokia lanzó un concurso para renovar su melodía y McDonalds uno para que los consumidores eligieran su hamburguesa ideal en Alemania.
Por eso, si lo que quiere es que su estrategia de marketing sea totalmente exitosa, pídale ayuda a sus clientes. Ellos sabrán perfectamente qué cosas faltan y cuáles se pueden mejorar.
Empleo de las Redes
Pero muchas veces no es nisiquiera necesario pagar a esos usuarios, pues ellos de manera autónoma expresan sus ideas sobre su marcas en sitios como Twitter, Facebool, LInkedin o Google+.
Tanto los comentarios positivos, como los negativos, pueden ser muy bien empleados para raplantear las estrategías y campañas de marketing y publicidad.
Un buen ejemplo de ello es la compañía de tecnología Dell, que periódicamente invita a sus seguidores, tanto con experiencias negativas como positivas, para que sean escuchado por los directores de atención al cliente y marketing para así tomar nota y hacer cambios al respecto.
También Nestlé ha creado eventos para que la gente se involucre de manera directa con su marca, como el “Happy, Healthy Gathering”.
Los paneles virtuales, son otra buena opción enviando cupones y productos gratis a los participantes para que los prueben y, a cambio, se les pide que rellenen unas encuestas. Ejemplo de ello es Starbucks que busca feedback de los clientes a través de su Starbucks Passion Pannel o Wal-Mart con su plataforma Elevenmoms, una mezcla entre comunidad online, experiencia del cliente y visitas en persona.
Otro método consiste en la atención personalizada de clientes con problemas, que puede llevar un poco más de trabajo, pero que al cambiar su percepción de forma individual puede ser una buena manera de replicar la experiencia con otros usuarios.
En este último caso es necesario tener un personal de atención al cliente entrenado para resolver problemas. Zappos y Disney son dos ejemplos perfectos de cómo los representantes de servicios tienen la capacidad de resolver problemas individuales de los clientes.
Por Periodista Digital, Ricardo Rodríguez
Equipo Mipagina.net