La idea de la suscripción es un poco complicado y diferente de lo que se ha esperado de Facebook. La Directora de Producto Naomi Gleit lo describió así: “Los usuarios pueden optar por enviar un botón de suscripción en su perfil. Una vez que lo hacen, cualquier visitante puede elegir si quiere recibir una de tres opciones en sus feeds de noticias de Facebook: todas las actualizaciones, la mayoría de los cambios (lo que uno ve normalmente) o las actualizaciones importantes (como casarse o tener un hijo)”.
Todo lo que se transmite a los abonados ya es público, y el acto de la suscripción también lo es. Gleit señaló que el botón de suscripción sólo se da a las personas un acceso más fácil al contenido que solo hubiera podido ver al ir directamente al perfil de alguien.
Sobre si las características lo hacen más parecido a Twitter Gleit respondió: «Creo que el botón de suscripción tiene un montón de características y opciones. Se trata más de obtener actualizaciones en su feed de noticias actuales».
Esta nueva característica de Facebook es algo que hace mucho tiempo los usuarios deseaban. Una vez que los usuarios tropezaban con el límite de Facebook de amigos, que es de 5000, se creaba una página en Facebook, donde simplemente la gente nueva podía hacer un «Me gusta» para poder recibir las actualizaciones. Pero entonces las personas o empresas tenían que mantener tanto dos tipos de presencias en la RED, lo que significaba mucho más tiempo y trabajo.
Esta nueva opción de suscribirse les dará la opción de migrar a la gente que ha «gustado» de sus páginas para convertirlas en suscriptores, Gleit añadió que sin embargo las personas que quieran acceder a análisis u otras características de gestión avanzada, probablemente debe pegarse con una página. Por otro lado aclaró que las marcas no pueden tener suscriptores. El botón de suscripción es sólo para las personas.
Manifestó además que el botón de “suscribirse” no es sólo para personas que ya son famosas y que cualquiera puede animar a sus seguidores a que lo hagan para recibir la información generada.
Aún así la opción de suscribirse no está disponible para los menores de edad, porque no se les permite hacer las actualizaciones públicas.
El botón de “suscribirse” va a ir apareciendo en la parte superior derecha de los perfiles, tendrá un uso bidireccional. Sirve tanto tanto suscribirse a enlaces de famosos y blogueros, como para decidir qué parte de las acciones de un usuario son susceptibles de convertirse en contenido de suscripción para terceros.
El añadido de este botón es una apuesta clara por el contenido, al tiempo que deja de lado la parte más personal de Facebook. El servicio de Mark Zuckerberg lo promociona con una frase: «Ahora puedes saber qué dice la gente en la que estás interesado, incluso si no sois amigos”.
Consecuencias para los medios
Jeff Sonderman, especialista en medios digitales del Instituto Poynter señaló que la nueva característica de Facebook puede tener consecuencias para los periodistas y para las estrategias de los medios de comunicación.
El cambio se produce en la manera de funcionar de Facebook, por lo que en primer lugar, Sonderman habla sobre el funcionamiento del nuevo botón. “Es necesario visitar la página de la red social dedicada a este elemento y permitir las suscripciones a su cuenta, solo entonces se puede visitar a otros usuarios de Facebook y suscribirse a su perfil”.
Además, Sonderman destaca una nueva utilización tanto para los periodistas como para sus medios de comunicación, ya que gracias a esta nueva aplicación de la red social se termina la limitación de 5.000 amigos por cada perfil personal, lo que ocasionaba a los usuarios la necesidad de filtrar a quiénes se admitía o bien crear diversos perfiles, separando el personal del profesional.
“Las personas que tienen una gran cantidad de suscriptores pueden sentir la presión de compartir más cosas en público. Si esto sucede, la búsqueda en Facebook se convertirá en una herramienta muy útil para los periodistas”, explica el especialista del Instituto Poynter.
De esta manera, por ejemplo, determinados cargos políticos, deportistas, artistas, etcétera, podrían llevar a Facebook al terreno de Twitter, con publicaciones más constantes que pueden ayudar al periodista a seguir determinadas informaciones o actuaciones de estos.
Por otra parte, existe una característica que puede convertirse en un arma de doble filo para el periodista. Se refiere Sonderman a que cada suscriptor controla la cantidad de historias que ve de un perfil, ya sea todas las actualizaciones, la mayoría o lo “más importante” según los criterios informáticos de la red social. La ventaja está en que los seguidores más fieles deberían optar por verlo todo, pero las estadísticas muestran que solo un 8% de usuarios de una página de Facebook vio todos los contenidos de canales de noticias.